Ya en la recta final de la campaña para las elección presidencial de la República Bolivariana de Venezuela, a celebrarse este domingo 28 de julio, solo podemos resumir que -la misma- se ha convertido en una conjunción de plataforma tecnológica con la activación de cámaras 360 y el uso de encuestas construidas con bots para llenar las redes sociales con resultados falsos y consolidar en el imaginario colectivo que la oposición ultraderechista está ganando este proceso comicial.
Esta tecnología utilizada por María Corina Machado, coordinadora del comando de campaña de Edmundo González Urrutia, con el apoyo del canal colombiano NTN 24 ($), con la instalación de un centro de información en Miami, para manejar los resultados del 28 de julio y construir una narrativa que inunde, en tiempo récord, a los medios internacionales y redes sociales de información que convierte la realidad virtual en escenas de apariencia real.
Con un alto costo en dólares, María Corina Machado con la asesoría de la Agencia para el Desarrollo Internacional (Usaid) ha recibido desde el 2015 más de 20 millones de dólares para atender a su organización Súmate y mantener activo a su partido Vente Venezuela, aun cuando éste no tiene carácter legal, por no estar registrado en el Consejo Nacional Electoral. Recursos que le han permitido montar una gran empresa cinematográfica con el uso de cámaras 360 que logran capturar, con varias lentes y en varias direcciones, las concentraciones realizadas en el país. Es decir, en una aglomeración de 500 personas, estas cámaras con un proceso llamado «coser», multiplican esas imágenes hasta un millón de personas. La tecnología utilizada por el Comando de Machado-González Urrieta puede cubrir hasta un área de 100 metros cuadrados.
Lo que sí está claro, y que no forma parte de la realidad virtual, es lo que le están entregando al “embajador” González Urrutia, como el programa de gobierno concebido por María Corina Machado denominado Venezuela Tierra de Gracia.
En políticas de salud y movilidad social, promete que la calidad de los resultados clínicos será a un costo adecuado y sostenible en el tiempo con el aseguramiento privado. Cada persona tendrá un seguro pagado, a través de su nómina, de acuerdo con su nivel de ingresos. El sistema será implementado por administradoras de seguros de salud de carácter privado.
En educación, Venezuela Tierra de Gracia, manifiesta que el país será trilingüe, donde todos dominen el español, el inglés y el lenguaje digital. Se transformará la educación básica y el bachillerato mediante el fomento de la innovación y la participación privada. Cada familia podrá inscribir a sus hijos en la escuela que prefiera. El Estado asignará a los planteles educativos váuchers para incentivar la educación privada, por cada estudiante matriculado.
Para la tercera edad, cotizantes de las pensiones para una vida digna, Venezuela Tierra de Gracia propone un nuevo sistema de ahorro de cuentas individualizadas que irán a un fondo común. Este sistema será manejado por empresas privadas que administrarán los fondos de pensiones, recabando las contribuciones de empleados y empleadores y poniéndolas a rendir en mercados de capital e inversiones.
El tema más escandalizante es la privatización de la producción petrolera, en Venezuela En Tierra de Gracia es la atracción de capitales hasta alcanzar el objetivo de privatizar PDVSA. Asimismo, se establecerá una política de privatización de la explotación gasífera para aumentar la producción de manera acelerada y contribuir así al desarrollo de la nación, evitando el actual estado de desperdicio de este importante recurso natural, con la expansión privada de la industria gasífera.
En materia de defensa redefinirá la doctrina militar con la disolución de la milicia, devolviendo el mando militar a los cuatro componentes tradicionales de las Fuerzas Armadas, desapareciendo el denominativo de Bolivariana. En servicios públicos, cada venezolano deberá cancelar la energía eléctrica, agua, teléfonos, desechos sólidos, etc.
Este será el cognomento más importante de la candidata inhabilitada, María Corina Machado, que no menciona en sus concentraciones por todo el país. La bandera de la privatización será el retroceso para una Venezuela soberana e independiente, a punto de arrodillarse ante el imperio gringo, como contraprestación a todo lo que ha financiado para que la ultraderecha se arrodille ante la bandera gringa, convirtiéndonos en una colonia, donde habrá que sustituir el cuadro de Bolívar por el retrato de George Washington. Edmundo González Urrutia, un copeyano que se acurrucó a la sombra de Rafael Caldera, en tiempos de Lorenzo Fernández, para quitarse de encima el apodo de Cuco, será recordado por la historia como un desconocido, así haya sido un candidato presidencial.
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William Gómez García Venezolano, periodista
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