Con sus abuelos conoció la poesía hecha canto desde los boleros, tangos, la música llanera de alta factura. Su abuela Ramona, le habló de Alberto Arvelo Torrealba, autor de Florentino y el Diablo, entre otros poemas, y le enseñó esa maravillosa literatura de El Llano venezolano. De esta manera Jesús Orlando Trejo Sierra, se acercó a las letras desde muy temprano en Barinas, donde nació el 12 de junio de 1979, donde ha residido la mayor parte de su vida, a la que describe con orgullo como la capital de El Llano venezolano, tierra de historia y de grandes hombres y mujeres.
El poeta, vive en un espacio que alquila desde hace diez años, al que llama “El laboratorio” que está ubicado en el centro de la ciudad de Barinas, cerca de sus abuelos y otros familiares con quienes comparte con mucha frecuencia.
Trejo en esta frase expresa lo que es su vida: “vivo entre silencios, soledades, amor y mi forma de ver y vivir el universo”. En esta declaración de vida encontramos parte de la visión del mundo de este poeta, con el cual vamos a conversar para conocer sobre su cotidianidad, planes y proyectos.
Para muchas la poesía ha llegado a ellos de maneras muy diversas, incluso autores que nunca habían leído poesía empezaron a escribir.
¿Qué te motivó, como llegaste a la poesía, a la literatura?
Mi inicio fue a través de mi abuela una gran lectora, que me llevó a conocer la obra de Alberto Arvelo Torrealba… de niño me inculcaron la lectura, a los 11 hice teatro infantil por más de 5 años. Leí grandes libros e importantes escritores (as), puedo mencionar varios poetas, extraordinarios lectores que me incitaron a escribir: Cati Álvarez, Leonardo Ruiz, Ángel Muñoz, mi padre Arnulfo Quintero, Livio Delgado, Carlos Álvarez entre otros.
Fue una gran época, nacía un movimiento literario en la ciudad de mujeres y hombres atrevidos (as).
Los muchos motivos, descubrir el maravilloso mundo de la poesía, sus escondrijos, almibares y más allá.
En las artes escénicas, artes que se ejecutan en grupo, es muy común conseguir organizaciones constituidas legalmente para la creación artística.
¿Formaste o formas parte de algún grupo de poetas?
Siendo director del Ateneo de Barinas, con 20 años de edad, con un grupo de amigos (as) creamos un grupo literario “Capsula Ateneísta”, nuestro mentor fue el poeta Arnulfo Quintero López. Era entre varios (as) escribir, leernos, vivirnos, vernos y bebernos las cientos de noches y sus amaneceres, haciendo poemas. Recuerdo mi primer recital fue una noche en la Universidad de los Llanos “Ezequiel Zamora” junto a mi compañera de taller Dory Rojas, qué susto y emoción. Nos consolidamos como un grupo estable, luego nos cobija el Instituto Nacional de Cultura y Bellas Artes (Inciba) allí surgió un gran camino de aprendizajes tanto en Venezuela como en Colombia.
La poesía está en el mundo desde muchos siglos atrás. Borges dice que la poesía no debería leerse o separase por épocas, asegura que lo importante es la poesía.
¿Quiénes son tus referentes en la poesía?
Siempre he sido muy exigente al leer poesía de El Llano, amante de los poeta españoles: García Lorca, Machado, Alberti, Garcilaso de la Vega entre otros.
Tengo varios poetas latinos que me marcaron: Benedetti, Jaime Sabines. Siempre he tenido la referencia del poema dedicado a la noche, al bar, al amor y sus afines. Me identifico con la poética de Arnulfo Quintero y Laurencio Zambrano.
El arte, en muchas de las áreas, entre las funciones principales está el entretenimiento, la diversión. Como sabemos, el arte no siempre busca educar.
¿Cuál crees que es la función de la poesía?
La poesía causa efectos diferentes en la sociedad. Quien es lejano a la poesía está marcado a ser un ente sin alma, todo es posible en y con la poesía… nuestra sociedad es un poema permanente (con sus alegrías y tristezas), vengo de una época que nos enseñaron a cultivar el espíritu, materia fundamental para encontrarse con ella. El hecho de leer y escribir es de vital importancia para un individuo, puedo dar fe que la poesía salva vidas. Los que conocen mi trabajo como promotor de lectura en las cárceles venezolanas, he sacado de la terrible oscuridad a hombres y mujeres a través de la poesía, son más de 10 años, puedo contarles miles de historias y referencias a la sociedad, la poesía no es de quien la escribe, sino de quien la necesita para salvarse.
¿Qué libros has publicado?
He publicado dos poemarios Dura Travesía (2005) y Azul Desnudo (2007) en Venezuela, tengo varios poemarios no publicados: Eraipanac que terminé con un viaje a Manao- Brasil en el año 2010 y estos años finalizando con Solares/Pórticos. Son trabajos más reposados, maduros, diferentes a los lenguajes y estéticas de los anteriores.
En Venezuela, desde cada territorio o estado han nacido poetas de muy buena pluma reconocidos a nivel internacional.
¿Tiene tradición poética el lugar dónde vives?
Barinas es una cuna de poetas de gran nivel… hay poetas hombres y mujeres que admiro su pluma profundamente: Alberto Arvelo Torrealba, Orlando Araujo, Guillermo Jiménez Leal, Leonardo Ruiz, Enriqueta Arvelo Larriva una sonetista de primera línea. Mi tierra es un parnaso eterno, donde usted meta el ojo hay un poeta escribiendo y cantándole a la vida.
En estos momentos de pandemia, las artes han tenido una variación en su acercamiento con los públicos. ¿Crees que hace falta la poesía?
No creo, estoy seguro de que debe revitalizarse permanentemente, soy de los que creen que los territorios, ciudades, barrios, calles cada casa debe ser un espacio para la formación, creación y el disfrute de movimientos incipientes, en construcción y consolidados, los poetas debemos estar en una enseñanza mutua escritores- lectores. Me gusta la temática muy nocturna en la palabra escrita, pero en este momento de país, me coloqué un reposo. Estoy en la edificación de una poesía más cercana, que huela y se vea a un gran patio de las casas viejas de Barinas. La poesía hará falta siempre, mientras el alma requiera de ella.
¿Qué es la Casa del Alba Cultural?
La Casa del ALBA Cultural de Venezuela nace de un convenio entre el Ministerio de Cultura y la Gobernación del estado Barinas, se instala a puerta cerrada a mediados del año 2014 siendo custodios del bien Cultural (antiguo Palacio del Marqués del Pumar) el Ministerio de Cultura en el estado. Se inaugura en el 2015 de la mano de uno de sus mentores el profesor Adán Chávez Frías, Gobernador de la época, recuerdo que se hace el Encuentro Nacional de Primeras Combatientes. Se nombra una junta directiva donde el abogado y poeta, Livio Delgado, es nombrado presidente en el 2016. Inicio como director de relaciones interinstitucionales, actualmente cumplo funciones en la Vicepresidencia.
Fueron dos años para que se convirtiera en una Fundación auspiciada por el estado, siendo la gobernación de Barinas, en los seis años de uso social, la institución que anualmente nos da un presupuesto.
La Casa del ALBA Cultural de Barinas es la sede nacional. Desde el ministerio de Cultura hemos recibido algunos aportes en la contratación de dos personas, nunca pudimos acceder a los recursos desde el Fondo del ALBA. Varios proyectos, reuniones, acercamientos para poder concretar propuestas para la consolidación de la Casa y han sido infructuoso. Son muchas misiones diplomáticas que han tenido con nosotros eventos y actividades de gran envergadura que hemos desarrollado con: Bolivia, Siria, Belarús, India, Ecuador, Sudáfrica, Rusia, Nicaragua, Cuba entre otras Embajadas acreditadas en el país desde sus inicio el Alba Cultural ha sido un epicentro de la Cultura combativa, de grupos emergentes, pueblos hermanos del mundo. Hoy está en una resistencia ante la situación económica y pandémica… Nos estamos desarrollando con gran esfuerzo gracias a las colaboraciones de amigos y amigas desde lo tecnológico, moral y espiritual.
¿Cuáles son tus planes como creador?
Este 2021, me ha permitido producir eventos desde la virtualidad; la cual casi desconocía, mejor dicho, tenía una resistencia interna a ese tipo de eventos, en mis planes creadores hay tantas cosas que quisiera desarrollar, pero adaptarse al tiempo universal actual es necesario y pasé.
Soy un atrevido, de la nada hago maravillas, desde la Vicepresidencia de la Casa del ALBA Cultural de Venezuela, motivamos, retomamos y organizamos eventos de carácter internacional: 3er Festival de poesía colombo- venezolano y el 2do encuentro internacional de títeres “Mery Carruido”, entre otros de nivel local, regional y nacional. Muchas instituciones están en una precaria situación económica por las múltiples causas que sabemos, pero me caracterizo por ser un emprendedor y optimista, necesitamos personas que en situaciones adversas creen y crean en lo que hacen. Yo amo mi trabajo cultural, estoy en la construcción de proyectos macros antes de finalizar este año: hacer la Feria del Libro del Caribe, 1er Festival de audiovisuales del ALBA 2021, entre otras cosas. Espero que en los próximos años podamos cumplir algunas metas personales.
¿Qué consideras que hace falta en Venezuela para motivar y formar a nuevos poetas, para que la poesía tenga mayor presencia en el país y el mundo?
Un verdadero plan de formación desde el Estado, más invasivo, amplio, con cualidades del territorio, que podamos aprender de experiencias, algunas muy exitosas, que dejaron grandes experiencias.
Y, por supuesto, incentivar la lectura, quien no lee no podrá escribir. La Revolución Bolivariana ha logrado estremecer, avivar, lograr cosas maravillosa desde el libro y la lectura, pero falta, dejemos oír la voces de los que pateamos las calles y no sólo de los avezados, construir colectivamente, pero de verdad políticas sobre el tema. Seguimos caminando.
Que la gente se atreva a escribir, que se forme (leer mucho), que los estados inviertan en la cultura, inunden de cosas maravillosas, la poesía es un eje transversal en la música, canto, pintura, teatro, danza en todos hay poesía.
Que este universo sea un gran poema de largo aliento para los seres vivientes.
¿Qué mensaje le envías a las nuevas generaciones?
Hay que soñar, luchar hasta lograr lo que deseas y amas, hace muchos años en una tertulia apareció un libro de Mario Benedetti, busqué y apareció un poema dedicado a los jóvenes:
“¿Qué les queda a los jóvenes?
¿Qué les queda por probar a los jóvenes
en este mundo de paciencia y asco?
¿Sólo grafiti? ¿rock? ¿escepticismo?
También les queda no decir amén
No dejar que les maten el amor
Recuperar el habla y la utopía
Ser jóvenes sin prisa y con memoria”
Que nadie les mate el deseo de seguir y si vuestro camino es ser un poeta o una poeta, vaya camine con lo que crea- la palabra escrita fluirá.
Inféctese de poemas.
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Tony González Artista venezolano y miembro de Correo del Alba en Venezuela
