A casi una semana de las elecciones subnacionales en Bolivia y en espera de los resultados oficiales, si bien ya hay algunas certezas, el Ministerio de Gobierno ordenó este jueves 12 de marzo la detención de la expresidenta de facto Jeanine Áñez; cinco exministro de su gabinete, dos de los cuales ya fueron capturados; y tres militares de alto rango, uno de ellos ya detenido.
Áñez fue detenida en el departamento del Beni, de donde es oriunda, y trasladada a La Paz en la madrugada de este sábado 13 de marzo, donde se encuentra bajo arresto en dependencia de la Policía Nacional.
La expresidenta de facto fue encontrada escondida bajo un somier en su residencia. La semana pasada participó en las elecciones como candidata a gobernadora de Departamento donde obtuvo un poco más del 15% de los votos, ubicándose en tercer lugar. Su gestión presidencial no le reportó réditos para sus ambiciones políticas.
Las órdenes de captura llegan en medio de un conflictivo escenario postelecciones en que los resultados oficiales, en el caso de algunas gobernaciones y alcaldías, siguen siendo esperados por el Movimiento Al Socialismo (MAS) y opositores; estos últimos, sin pudor alguno, han hecho llamados a enfrentamientos en los lugares donde el MAS lleva ventaja y accedería al poder local, desplazando por primera vez a los tradicionales grupos de la derecha que controlaban estos municipios, como es el caso de San Ramón. El definitivo escenario puede resultar nodal en el caso de las nueva configuración de fuerzas en el departamento cruceño y los cívicos lo saben. Además, la disputa por la alcaldía está voto a voto entre el candidato de Unidad Cívica Solidaridad (UCS), de Jhonny Fernández, y Comunidad Ciudadana-Autonomía por Bolivia (C-A), que encabeza el candidato Gary Áñez. Según los datos oficiales del Tribunal Electoral Departamental (TED), el candidato de UCS cuenta con el 35.39% de los votos, mientras que el de C-A, el 34.74%, la diferencia entre uno y otro candidato es del 0.65%, lo que le daría un triunfo al primero.
Mediatizados como triunfo total han sido los resultados favorables para las alcaldías de Cochabamba con Manfred Reyes Villa y la de La Paz con Iván Arias, también exministro de Áñez, ambos superaron el 50% de los votos al conteo actual y no cabe duda de que serán las nuevas autoridades locales. Así como Eva Copa en El Alto, que ha obtenido el mayor porcentaje de votos por el momento en estas elecciones subnacionales. Sin embargo, la ciudad de El Alto sigue votando por el MAS y así lo demostró en los sufragios por gobernador, donde la opción por el candidato masista supera al partido de Copa por más de 10 puntos y otorga más de 40% a Franklin Flores. En un escenario de unidad, sin el alejamiento de Copa del MAS, el partido de gobierno hubiese alcanzado 80% de la preferencia, pero este es un ejercicio reminiscente.
Ahora hay que esperar para un análisis más profundo, el Gobierno sigue buscando a los prófugos que deben responder ante la Justicia y el Tribunal Supremo y Departamental de elecciones sigue en el conteo de votos.
Lo que está claro es que el escenario político en Bolivia no está fácil de predecir, como suele ser en este país.