Por Correo del Alba
Se trata del excomandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, Williams Kaliman, quien pese a ser una de las personas con mayor poder de decisión durante los acontecimientos en noviembre 2019, está acusado de no haber desplegado los militares para supuesta protección del pueblo, “incumplimiento de deberes”, reflejado en la Ley N° 1173. Por lo cual el Juzgado Cuarto de Anticorrupción, dictó este 28 de septiembre en La Paz, la medida cautelar de detención domiciliaria, sin derecho laboral y una multa de 50 mil bolivianos.
Desde diciembre 2019 el abogado Omar Durán interpuso la querella contra el exuniformado. En declaraciones a la prensa boliviana, Durán aseveró que durante el juicio solicitará la pena por cuatro años de cárcel.
Antes de la renuncia de Morales, Kalimán, vestido con traje de campaña, le «sugirió» al presidente que “renuncie a su cargo para pacificar el país”. En esas mismas declaraciones ya estaba convencido de la dimisión al cargo, las movidas posteriores fueron la toma de diferentes ciudades por los cuerpos policiales y las Fuerzas Armadas, así como de grupos de choque que desestabilizaron al país antes, durante y después de la jornada electoral de 2019.
En agosto fue imputado nuevamente por denuncia realizada por los diputados Rafael Quispe, Wilson Santamaría, el abogado Durán y el militar Elías Calderón, ya que el excomandante, en su alocución por el aniversario de las instituciones castrenses, incitó presumiblemente al odio y discriminación. Sin embargo, esta última acusación fue desestimada por el Ministerio Público que indicó que la misma debe ser elevada a tribunales militares que cuentan con las leyes precisas para enjuiciar.